Todo sigue "e-gual"

Ayer se paralizó en el congreso la ley antes conocida como Sinde. Queda meridiamente claro que tanto la forma en que se gestó la misma como el proceso de votación en el congreso fue un auténtico galimatías que con filtraciones de Wikileaks incluidas - larga vida a Assange - ha provocado a la postre que se pervierta el espíritu de esta iniciativa.
Creo firmemente en el ordenamiento jurídico y legislativo del que nos hemos dotado, con sus virtudes y defectos, por lo tanto he de concluir, confiando en el buen hacer de sus señorías, que efectivamente con este proyecto no se hacía justicia ni se solucionaba el conflicto existente entre derechos intelectuales e industriales y libertades individuales de los usuarios.
Sin embargo, sospecho que sin duda el debate seguirá candente y nos dará más capítulos durante los próximos años, además, siguiendo la tónica utópica que caracteriza a este Blog, confío en que antes o después se conseguirá construir una norma que conjugue la protección necesaria a los creadores, autores y productores en el ejercicio de su profesión con el libre acceso a la cultura y la información que todos nos merecemos y que por otro lado garantizan todas las constituciones de los países democráticos. En todo caso no podemos pretender que las productoras audiovisuales, por ejemplo, se conviertan en entidades sin ánimo de lucro en las cuales trabajen guionistas como voluntarios.
Sea como sea, quiero abogar por la moderación y el espíritu reflexivo, debemos evitar el insulto (Alejandro Sanz, como compositor de reconocido prestigio internacional o sólo como individuo tenía derecho a expresar su opinión), alejarnos de posiciones partidistas que conviertan esta sana polémica en un Madrid-Barça y así conseguir entre todos llegar a un punto de encuentro común.
He podido discutir constructivamente con amigos estos días y leer argumentaciones a favor y en contra muy armadas y didácticas, para evitar posibles críticas quiero aclarar que todos los enlaces que ilustran esta y otras entradas tienen el objeto de informar al lector y que además, como se puede apreciar por la ausencia de publicidad no existe ánimo de lucro alguno, quizás esta sea la diferencia clave entre vulnerar o no la propiedad intelectual e industrial de otros.
Para concluir, reproduzco a continuación un extracto de unos comentarios vertidos en el diario El País, se trata de la respuesta de Turbutopía a un ciudadano que desde mi punto de vista utiliza la descalificación para sostener su posición:

jose antonio - 22-12-2010 - 11:34:33h
A los pocos que aun defienden aqui esa absurda ley les digo algo que es el punto de partida de todo: descarghar archivos de internet NO es ningun delito, preguntad a un juez, a un abogado. Gobierno e intereses economicos mafiosos quieren hacer creer como verdad algo falso a base de repetirlo muchas veces, cosas que SI son delito: los monopolios, el agiotismo, la presion mafiosa, lo que hacen precisamente quienes quieren ostentarse como los buenos de esta pelicula. En cuanto a hablar de la "industria" ¿de que estamos hablando? ¿de los artistas como Sanz que tributan fuera de españa para ahorrarse impuestos? ¿de las distribuidoras multimillonarias? ¿de la segae que se reparte a si misma millones de su patente de corso?. Que los mafiosos defiendan lo indefendible es normal pero que lo haga algun trasnochado aqui indica muy poca cultura y muy poca inteligencia.
 

Hola Jose Antonio (32),
Poca cultura la tuya que utilizas cultismos sin ningún criterio, verás, el término "agiotismo" no existe, en todo caso si te refieres al hecho delictivo de cometer agio deberías hablar de agiotaje, además sería bueno que revisases la norma de uso de las tildes. No te preocupes que estos consejos te los ofrezco gratis... Gratis, como se accede a gran cantidad de contenidos audiovisuales y literarios que requieren de un enorme esfuerzo creativo y económico. Está claro que el planteamiento de la ley ha sido erróneo y quiero pensar que por eso se ha rechazado en el congreso y no por otros intereses políticos (yo soy de esos que aún cree en el funcionamiento de las instituciones democráticas de las que nos hemos dotado). En cualquier caso, más pronto que tarde habrá que retomar el tema y llegar a un punto intermedio en el que se proteja a productores y creadores sin menoscabar los derechos fundamentales de los usuarios. Gracias de antemano a los moderados por reflexionar al respecto.
PD: Estimado José Antonio, como veo que te encanta el "pirateo", me voy a permitir reproducir tu comentario en mi Blog


Sirva como ejemplo de lo que no se debe hacer ante este asunto, incluso reconozco cierta desmesura en mi réplica, en cualquier caso el moderador de El País ha retirado ambos con buen criterio.
Nos vemos en la red.

Comentarios

  1. Hola turbotópico, gracias por invitarnos a pensar sobre el asunto, aun desde una confesada ignorancia. Mi impresión es que en este debate - como en casi tantos- se están confundiendo dos planos que conviene deslindar. Probablemente la disposición adicional de marras era excesiva en cuanto al poder conferido a la administración. Confiemos pues en los jueces para decretar el cierre de una actividad presuntamente ilícita - aunque ciertamente no tenemos problemas en precintar y clausurar administrativamente negocios y casas que infringen la normativa administrativa. Pero, en cuanto a lo sustantivo, es difícil justificar el uso libérrimo de la propiedad ajena y más aún su explotación comercial sin que el propietario tenga nada que decir al respecto, me parece que sólo está justificada si estamos dispuestos, también, a acabar con la propiedad privada en otros ámbitos. Y como dice Guelbenzu en un muy recomendable artículo de hoy mismo en El País, muchos de esos que reclaman descargar lo que sea y como sea dudosamente van a estar dispuestos a aplicar el gratis total a todas esas propiedades - y no son pocas- que hacen posible su empresa o explotación comercial como "intermediarios" en la sociedad de la información. No hay un derecho a la cultura ni libertad de expresión que valga que justifique un atropello como el que se proclama legítimo por el mero hecho de que la apropiación es tecnológicamente muy sencilla. ¿Cuándo esa circunstancia fáctica ha justificado nada en el plano normativo? Muchos, por su fortaleza o inteligencia, tienen muy fácil robar o matar a otros: ¿debemos permitirlo sólo porque enfrentarnos a ellos o evitarlo es muy costoso? Sigamos pensando, como nos propone turbotópico, en cómo ponderar o equilibrar los intereses en juego, pero sin presuponer que antes de empezar la partida ya uno - el pirata- la ha ganado de antemano.

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  2. Gracias Pablo por tu valiosa aportación al asunto, creo que todavía quedan capítulos por escribir. Somos líderes de la OCDE en descarga fraudulenta y pirateo y esto es bastante vergonzante. ya existen legislaciones muy restrictivas en nuestros entorno (Francia, Alemania, USA, etc) que penalizan incluso al usuario. No se trata de copiar como siempre lo que hacen otros si no de tomar ejemplo y aprovechando su experiencia no cometer los mismos errores. Veremos qué inventan los "sabios"...

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  3. La ley se va a aprobar sin consensuar con las partes implicadas y con dimisiones, dudas y vacios que le auguran un gris y tormentoso futuro. A pesar de la necesidad de regular ciertas costumbres fraudulentas, me temo que esta no es la forma. Ya veremos...

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